Cómo tratar la costra láctea de los bebés

La formación de la costra láctea se produce a raíz de una inflamación que provoca una estimulación de las glándulas sebáceas. Se trataría por tanto de una variante de la dermatitis seborreica infantil y aunque suele ocurrir que desaparece de forma natural, muchas veces por el aspecto escamoso que presenta, puede hacer que los padres se preocupen demasiado. Por este motivo os queremos explicar con más detalle a qué se corresponde y también, cómo tratar la costra láctea de los bebés.

La costra láctea de los bebés

Cuando surge la costra láctea en los bebés, la actividad de las glándulas sebáceas se hace evidente con la aparición de escamas, que se presentan en las zonas donde estas estructuras están más presentes. En detalle, la costra láctea aparece en el cuero cabelludo, entrecejo o región retroauricular .

Sin embargo, también pueden ocurrir condiciones en las que la costra láctea aparece en áreas no visibles, como el área del pañal y en los pliegues de la piel del cuello o debajo de los brazos.

La costra láctea también puede ir acompañada de enrojecimiento , mientras que la mayor producción de sebo se estratifica en la superficie de la piel, creando escamas cuyo color puede variar del blanco al amarillento.

Las escamas son grasosas y se adhieren a la piel, pero no causan picazón ni sensación de ardor.

La formación de la costra láctea está relacionada con la variación de las hormonas sexuales maternas, lo que en el niño provoca un aumento de la producción de sebo asociado a la proliferación de un hongo llamado Malassezia .

En los niños que tienen aspecto de costra láctea, también vemos un desequilibrio en la flora bacteriana de la piel , con una mayor proliferación de microbios que favorecen la acción fúngica.

¿Cuándo aparece la costra láctea?

La aparición de la costra láctea puede ser bastante temprana, ya que a partir de la segunda semana de vida podemos notar la estratificación de las primeras escamas. Este proceso también puede aparecer alrededor de la sexta semana.

El pico se produce alrededor de tres meses, después de lo cual veremos una fase menguante. Se estima que la costra láctea afecta a alrededor del 10% de la población neonatal.

¿Cuánto dura la costra láctea? 

Como decíamos anteriormente, el pico, en los niños con costra láctea, se produce alrededor del 3er mes de vida.

A partir de este momento, generalmente se observa una tendencia que ve la regresión en la producción excesiva de sebo , que luego se regulariza dentro del año de vida, dando lugar así a la desaparición definitiva de la costra láctea .

Sin embargo, en un 7% de los casos se ve una presencia continuada de la costra láctea incluso entre el primer y segundo año de vida.

¿Cómo tratar la costra láctea?

Hay varios remedios naturales que se sugieren erróneamente, entre ellos, por ejemplo, el uso de aceite de oliva. Sin embargo, no se recomienda el uso de este último porque proporciona alimento a la Malassezia.

Podemos utilizar productos de baño para mejorar el aspecto y reducir la presencia de escamas en las zonas más visibles. Estos últimos son más adecuados, porque tienen formulaciones para niños.

En concreto, podemos utilizar un aceite de baño para bebés que no haga espuma y que nos ayude a suavizar las costras y hacer que se desprendan . Elegir un producto delicado que no tenga ingredientes agresivos para la piel es fundamental para no causar molestias al bebé.

La costra láctea también puede presentarse en adolescentes y adultos y se trata con preparados específicos que no se pueden utilizar sobre la delicada piel de los recién nacidos ni en contacto con el cuero cabelludo. Por eso siempre es mejor evitar hacerlo tú mismo y ante la menor duda contacta con tu pediatra de confianza.

Qué no hacer ante la aparición de costra láctea 

En el caso de una costra láctea muy evidente, se deben evitar algunas conductas que podrían agravar la costra o sensibilizar la piel:

  • Evita los remedios caseros.
  • Evita quitar la costra láctea de forma traumática, levantándola con las uñas o rascándote el cuero cabelludo. Podemos ayudarnos de un peine para retirar las escamas que se hayan caído y hayan quedado atrapadas en el pelo.
  • No aplicar productos a base de ácido salicílico, corticoides tópicos o antifúngicos cuya eficacia no esté demostrada por resultados científicos evidentes.

¿Cuándo consultar al pediatra?

Cuando el recién nacido presenta costras y lesiones, o vesículas en la piel, siempre es recomendable consultar al pediatra. Hay algunas formas de dermatitis, como la dermatitis atópica, que pueden provocar enrojecimiento y piel áspera, así como algunas molestias, como picazón y ardor, y concentrarse en varias partes del cuerpo.

Otra condición patológica, que podría confundirse con la costra láctea, es la histiocitosis de células de Langerhans . Este trastorno es raro y se caracteriza por que la piel adquiere un color rojizo/marrón. Este último está salpicado de lesiones con costras vesiculares, que pueden extenderse por toda la superficie del cuerpo y se acompañan de un posible agrandamiento del hígado y el bazo.

En definitiva, la costra láctea es un fenómeno que no debe preocupar a los padres, solo debemos esperar con paciencia y cuidar a nuestro pequeño con productos específicos que pueden mejorar la hidratación y protección de la piel.

Leave a Reply

Your email address will not be published.