cómo detectarlo y tres remedios caseros para tratarlo

Las bajas temperaturas que por estos días se viven en varias ciudades del país traen promueven la aparición de algunas enfermedades respiratorias, en especial en niños. Infecciones respiratorias, resfriados o gripa son comunes cuando el invierno aparece, además, el Covid-19 no se ha ido y siempre será un riesgo para los pequeños y sus familias.

Sin embargo, hay un síntoma muy común en medio de todas estas patologías, el cual resulta ser muy molesto y casi indetectable. Se trata del dolor de garganta, el cual cuando aparece por sí solo no significa que se trate de algo serio, pero sí trae algunos comportamientos que alteran las rutinas de los pequeños.

La falta de apetito por el dolor al tragar suele ser la principal señal que indica que hay dolor de garganta, algo que se puede atacar, obteniendo muy buenos resultados, con algunos remedios caseros fáciles de preparar.

Lo primero que debe hacer para evitar que la irritación en esta zona de los niños se incremente es tratar de que no griten y mantener cubierta la garganta con alguna prenda con el fin de general calor y aliviar el malestar.

Así mismo, el lugar donde duermen los niños debe tener una temperatura adecuada y una humedad relativa estable, esto le ayudará a evitar que la garganta no se reseque más. En cuanto a la comida, suministre sopas, bebidas o alimentos blandos que se puedan ingerir más fácil que los demás y asegúrese de dar suficiente agua al clima para calmar la irritación.

Remedios caseros para aliviar el dolor de garganta

Gárgaras de agua con sal

Este remedio casero es muy común y suele ser bastante efectivo, pues además de generar alivio en la garganta, también reduce la inflamación y ataca las infecciones que estarían provocando el dolor de garganta.

Lo ideal es disolver 1/2 cucharada de sal en 4 onzas de agua tibia; luego, los niños deberán hacer gárgaras, enjuagarse la boca y luego escupir la mezcla. El procedimiento hay que repetirlo tres o cuatro veces por varios segundos.

Si los niños son muy pequeños para poder hacer gárgaras, el suero fisiológico suele ser una opción válida, según el Hospital Royal Infirmary de Edimburgo.

Pastillas de palodulce

El palodulce es una planta cuyas propiedades cicatrizantes, antiinflamatorias y reparadoras contribuyen a aliviar el dolor de garganta. Según el Instituto de Ciencias Médicas Sanjay Gandhr, esta hierba ayuda a regenerar la mucosa de la garganta.

En algunas farmacias se pueden encontrar pastillas o caramelos que los niños pueden masticar fácilmente que contribuyen a aliviar el dolor.

Miel con limón

Este remedio natural es muy común entre la cultura tradicional. Lo ideal es mezclar una cucharada de miel con el zumo de medio limón hasta que este se disuelva totalmente. Mientras el niño lo ingiere de forma lenta, la mezcla hará su trabajo en la garganta y aliviará el dolor-

Las propiedades antibacterianas de la miel atacará la infección en la garganta; además, el limón también posee propiedades antiinflamatorias. Sumado a esto, tiene alta cantidad de vitamina C que ayudará a mejorar el sistema inmune de los niños para combatir, de manera natural, las infecciones en esta zona del cuerpo.

Tenga en cuenta que estas soluciones no reemplazan el concepto ni las recomendaciones de un profesional y si el dolor de garganta persiste, es necesario consultar al pediatra para realizar un tratamiento más específico.

Estos son algunos remedios caseros que, por lo general, son fáciles de preparar y utilizan elementos naturales que tienen algunas propiedades médicas que contribuyen a aliviar esta sintomatología, sin embargo, en algunas ocasiones este síntoma está encadenado a otra patología que requiere atención de un profesional.