Anteriormente no existían productos especiales en los supermercados para limpiar las casas, pues recurrían a remedios naturales que tenían a su disposición.
En la actualidad, aunque sí que contemos con estos productos, muchas veces, es mejor recurrir a algunos ingredientes naturales, ya que suelen ser incluso más eficaces que las opciones convencionales.
Los remedios naturales son opciones que, en ocasiones, resultan ser más buenos contra la suciedad de nuestro hogar. Pero además, son más beneficioso para el medio ambiente y para la salud de la persona que los usa.
Que un producto huela bien, no significa que esté eliminando toda la suciedad. Y eso es lo que ocurre con muchos productos químicos, puesto que a veces están compuestos de perfumes y no de ingredientes eficientes y de calidad.
En ese caso, para tener siempre la casa bien limpia, hay algunos productos que nunca deberían faltar en el armario de la limpieza.
A continuación, exponemos cuáles son los mejores productos naturales para limpiar y los más eficaces en este ámbito, para que siempre tengas la casa libre de gérmenes.
Vinagre blanco
Uno de los ingredientes por excelencia es el vinagre blanco. Éste producto posee propiedades antibacterianas que ayudan a deshacerse de toda la suciedad, así como a eliminar todas las bacterias y gérmenes.
Por lo general, el vinagre blanco puede utilizarse para limpiar algunas superficies de nuestra casa que están un poco sucias, pero también sirve para acabar con manchas difíciles o con restos de suciedad en partes complicadas.
En ese caso, es un potente limpiador que consigue acabar con manchas de vino, manchas de agua en la madera, manchas de sudor en la ropa blanca y manchas de maquillaje.
Asimismo, el vinagre blanco logra destapar cañerías, dejar los cristales impolutos, acabar con el mal olor de la nevera, y acabar con el mal olor en general por toda la casa.
En definitiva, puede utilizarse en el comedor, salón o habitación, así como en la cocina y el baño, las zonas que se llenan más de bacterias.
Para utilizarlo, tan solo es necesario mezclarlo con agua en un atomizador, y aplicarlo allá donde vayamos a limpiar. Lo mejor es retirarlo con un trapo, y, en algunas ocasiones, retirarlo con agua.
Bicarbonato de sodio
El bicarbonato de sodio, junto al vinagre blanco, es perfecto para la limpieza de prácticamente toda la casa, pero especialmente del baño y la cocina.
Este ingrediente tiene propiedades antibacterianas, y, en el baño, evita que la cal se adhiera en las superficies o en las tuberías.
Además, el bicarbonato puede eliminar los malos olores, e incluso acabar con manchas difíciles, como son las que deja el lavavajillas en los cubiertos y la vajilla.
Por lo general, para utilizar este producto hay que aplicar una pequeña cantidad en la zona que vayamos a limpiar y, junto con un poco de agua, frotar. A veces, hay que dejarlo actuar durante un periodo de tiempo, como es el caso si queremos limpiar productos.
Si incluyes el bicarbonato de sodio en tu rutina de limpieza, enseguida verás como tu casa comienza a estar más limpia y libre de bacterias.
Limón
El último de los productos más eficaces de limpieza es el limón, pues además de ser un ingrediente imprescindible en tus comidas por sus nutrientes, también debería ser esencial en el hogar, para acabar con todas las impurezas.
El limón puede servirnos para limpiar restos imposibles de cacerolas y sartenes, para limpiar grifos, para acabar con malos olores de la nevera o de lavavajillas, e incluso para limpiar los azulejos del baño.
Por lo general, suele utilizarse su jugo, colándolo de la pulpa, y suele aplicarse en las superficies que se quieren limpiar. Una vez eliminadas las manchas, se retira el producto con un paño mojado para que quede la casa impecable.
En algunas ocasiones, se recomienda dejar actuar el jugo de limón por unas horas para lograr mayores resultados.
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