Los orígenes de la ayurveda, la medicina tradicional originaria del subcontinente indio, son remotos. Según un estudio de la Universidad de Minnesota, la tradición oral que forma su base teórica fue transcrita hace más de 5.000 años al sánscrito en cuatro textos sagrados del hinduísmo: el Rig Veda (3000-2500 a.C.), el Yajur Veda, el Sam Veda y el Atharva Veda (1200-1000 a.C.).
Aunque los conocimientos que se utilizan actualmente se basan, más bien, en tres volúmenes a los que se suelen referir los expertos como “la gran tríada” o Brhattrayi, que está formada por el Charak Samhita, el Sushurta Samhita y el Ashtanga Hridaya. Estos libros, escritos hace más de mil años, describen los principios y teorías básicos a partir de los cuales ha evolucionado la ayurveda moderna.
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MANTENER EL EQUILIBRIO Y LA ARMONÍA INTERIOR
“La ayurveda es el sistema de sanación más antiguo que se conoce en el mundo, junto a la medicina tradicional china”, explica Julija Kasko, responsable del Centro Wellness Nirama en Baobab Suites. “Su objetivo principal no es curar las enfermedades, sino prevenirlas, aplicando remedios naturales que ayudan a mantener el equilibrio y la armonía interior”.
Según Julija, la ayurveda reconoce la importancia del equilibrio físico, la liberación emocional, la salud mental y la conciencia plena, como partes de la visión completa de la salud. “La medicina occidental hace bien su trabajo en casos de lesiones traumáticas, emergencias o cuidados en casos agudos”, continúa la experta, “pero en Occidente, las personas sufren también de otras patologías como enfermedades del corazón, artritis, alergias, cáncer o las adicciones”.
En el Centro Nirama, ubicado en Baobab Suites, se ofrecen masajes y terapias ayurvédicas que van mucho más allá de un simple tratamiento de belleza. “Son terapias con un seguimiento personalizado y específico, en las que ofrecemos tratamientos holísticos enfocados en la raíz de los desequilibrios del organismo de cada uno de nuestros usuarios, sean estos emocionales o físicos, y en la curación de la causa del dolor”, explica Julija. “También ofrecemos terapias personalizadas para tratar patologías que la medicina tradicional considera crónicas, como la psoriasis, las migrañas o la sinusitis”.